Libertad de Expresión y Libertinaje
Omar Marcano
Nadie duda que en Venezuela existe una absoluta libertad de expresión que tiende a libertinaje, eso no lo discuten ni los intelectuales de la ultraderecha que acudieron a su extraña cita en Caracas la semana pasada, ellos experimentaron una libertad ilimitada ya que dijeron y escribieron lo que quisieron, incluyendo el intento de burla al Comandante Presidente Hugo Chávez, la cual tuvo respuesta inteligente y contundente de este último.
Lo que debería ser objeto de debate en Venezuela es el libertinaje y la ausencia total de responsabilidad con la cual los medios de comunicación asumen la producción de mensajes absolutamente desvinculados del interés social y general que están obligados a preservar. Solo parémosnos a escrutar los programas matutinos de GLOBOVISION y también los de la tarde y la noche como Aló Ciudadano, Grado 33 más el Show de Kiko y Carla, los cuales muestran claramente lo que quiero decir, es allí donde el Directorio de Responsabilidad Social de Radio y Televisión debe poner la lupa, y con ese material aplicar la normativa legal vigente en la materia.
Periodistas y expertos en comunicación de la oposición, incluidas Ibeyise Pacheco y Marta Colomina han reconocido que la libertad de expresión debe estar acompañada de la responsabilidad social; esto es, quienes emiten opiniones deben responsabilizarse por lo que expresan.
Veamos entonces lo que declararon estas personas en su momento, a quienes nadie puede acusar de Chavistas.
Empecemos con la inefable Marta:
“...La gran trampa de los medios de difusión masiva consiste en enmascarar la realidad social presentando la imagen seudo-universal de la mujer blanca, feliz, atractiva, moderna, elegante, enamorada y rodeada de objetos materiales de marca identificable, muy diferente a la dramática situación de la mujer obrera y marginal en la vida real del Tercer Mundo. Esta industria cultural cumple así una doble función ideológica para la reproducción y refuerzo del sistema capitalista: a la par que vende mercancías y produce plusvalía al capital, fomenta en las no consumidoras la ilusión de que bajo ese sistema, ellas podrán satisfacer algún día, sin necesidad de cambiar nada, sus requerimientos de consumo y ascenso social...” (COLOMINA DE RIVERA, Marta. “La Celestina mecánica, estudio sobre la mitología de lo femenino como simulacro del cambio y su manipulación a través de la industria cultural”. Monte Ávila Editores, Caracas, 1976, p. 13.).
Y ahora Ybeyise:
“...Nosotros los periodistas solemos creernos expertos en todo. Pretendemos decirle al lector nuestra verdad y nos distanciamos dramáticamente de su realidad. Eso pudo haber funcionado en una época, pero ya no es así. Y con toda responsabilidad les anuncio que comenzó la caída de los periódicos omnipotentes. Esos periódicos que manejan el poder para beneficiar sus intereses, que se olvidan de su público y que lo único que quieren, además de un gran negocio, es atropellar, hacer dinero, chantajear, negociar cargos públicos, en fin, abusar del poder...” ( Ibéyise Pacheco. Conferencia en la Universidad del Zulia (LUZ), en el Estado Zulia 1996)
Los expertos:
Dr. Allan R. Brewer-Carías, 1991:
“...la prensa, radio, cine y televisión, no tiene límites en nuestro país. Se dice lo que se quiere y se perjudica a quien sea, sin que nada pase. No se trata, por supuesto, de limitar o censurar el derecho a informar: de lo que se trata es de responsabilizar a quien informa de lo que diga. Insistimos, que se informe lo que se quiera, pero que se responsabilice efectivamente a quien informa, de lo que diga, protegiéndose a quien se lesiona por informaciones falsas. Las escasas previsiones de la Ley de Ejercicio del Periodismo no son suficientes; y la democracia no es completa si no se garantiza el derecho a ser informado y a reclamar contra las informaciones falsas y difamantes. Una normativa de este tipo, podría detener la progresión hacia una dictadura de los medios de comunicación, que amenaza todo nuestro sistema de libertades” (BREWER-CARÍAS, Allan R., “La Constitución y sus enmiendas” Editorial Jurídica Venezolana – Caracas, Venezuela 1991 – Pág. 104).
Dr. Ricardo Combellas- 1995
“..., el debate que ha resurgido en el país sobre el derecho a la información llevó a que nos visitara una de esas corporaciones internacionales muy poderosas, protectora de los medios de comunicación, más bien de los propietarios de los medios, que es la Sociedad Interamericana de Prensa. Ellos señalaron, con motivo de la discusión sobre la Ley que consagra la colegiación obligatoria de los periodistas, recuerdo perfectamente y lo recogieron los titulares, que el Pacto de San José niega la colegiación como un pretendido derecho que impide que todos podamos participar del mismo. Entonces se afirmaba: el Pacto de San José es un pacto supraconstitucional, que está por encima de la Constitución, además ratificado por Venezuela y que por tanto, cualquier norma contraria que se apruebe en el orden interno, sería una norma que no tendría fuerza constitucional...Y a mi me surgió una pregunta, que es la siguiente: bueno, si ese es el planteamiento, en el mismo Pacto de San José está consagrado el derecho de réplica y el derecho de réplica fue uno de los derechos que más combatieron los propietarios de los medios cuando se discutió la reforma constitucional de 1992, y que llevó a su fracaso.” (COMBELLAS, Ricardo –“Venezuela en la encrucijada: restos de la era pospopulista” –Editorial Panapo- Caracas, 1995 – Pág. 117)
Darío Restrepo, 2003: periodista colombiano con cerca de 50 años como periodista. Ex Defensor del Lector en el diario colombiano “El Tiempo” de Bogotá”
“...Hay demasiada retórica en cuanto a la libertad de expresión: más discursos que realidad. No es decir lo que a uno le da la gana, sino decir lo que uno debe decir; esa es la libertad verdadera. Eso significa reconocer los límites de mi libertad de expresión, ésta se fortalece con la responsabilidad y ella ve los límites, allí se mueve libremente. No es un valor absoluto, se complementa con otros...” (El Nacional, 31/005/2003)
Cerramos con una opinión jurídica para tumbar los argumentos de quienes piensan que la libertad de expresión puede ser solo sometida por el Estado:
Corte Interamericana de Justicia -1985
“...la libertad de expresión se puede ver también afectada sin la intervención directa de la acción estatal. Tal supuesto podría llegar a configurarse, por ejemplo, cuando por efecto de la existencia de monopolios u oligopolios en la propiedad de los medios de comunicación, se establecen en la práctica "medios encaminados a impedir la comunicación y la circulación de ideas y opiniones ...” (Opinión Consultiva OC-5/85 de 13 de noviembre de 1985. Sobre la Colegiación obligatoria de periodistas –artículos 13 y 29 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos – Solicitada por el Gobierno de Costa Rica)